Protege tu wifi
¿Qué riesgos hay en que alguien utilice nuestra WiFi?
Tener la WiFi abierta implica tener nuestra conexión a Internet compartida, además de otros riesgos:
Reducción del ancho de banda. Dependiendo del número de dispositivos intrusos y del uso que hagan de la red, pueden llegar a impedir la conexión de nuestros equipos.
Robo de la información transmitida. Una configuración inadecuada de nuestra red inalámbrica puede permitir a un atacante robar la información que transmitimos.
Conexión directa con nuestros dispositivos. Un intruso con los conocimientos suficientes, ayudado por un problema de seguridad o una instalación sin la seguridad apropiada, podría acceder a los equipos conectados a la red. Esto implicaría darle acceso a toda nuestra información.
Responsabilidad ante acciones ilícitas. Cuando contratamos una conexión a Internet con un proveedor de servicios, ésta queda asociada a nosotros, asignándole una dirección IP que nos identifica dentro de Internet. Cualquier acción realizada desde esa dirección IP lleva a la persona que contrata el servicio: nosotros.
¿Cómo protegernos?
Si queremos minimizar la probabilidad de ser víctimas de un ataque que pueda poner en riesgo nuestra red WiFi debemos comprobar su configuración de seguridad.
La configuración por defecto del router no siempre es la más apropiada.
El router debe incorporar al menos el protocolo WPA entre sus medidas de seguridad. Si es anterior a esta opción de seguridad debemos sustituirlo. Para conocer qué protocolo utiliza, lo primero es acceder a la configuración de nuestro router. Si no sabemos cómo hacerlo, podemos consultar el manual o buscar información sobre nuestro modelo en Internet.
¿Cómo detectar a un intruso?
Una de las formas de saber si alguien está utilizando nuestra WiFi es apagar completamente todos nuestros equipos y comprobar el parpadeo de las luces del router. Si continúan parpadeando es posible que otras personas estén utilizando nuestra conexión sin nuestro consentimiento.
Además, podemos revisar el estado de nuestra red fácilmente: desde un PC con Windows podemos descargar y utilizar Wireless Network Watcher y desde un dispositivo con Android, la aplicación ezNetScan.
Consejos finales
Aunque nos parezca que estas cosas solo les pasan a los demás y que nuestra red WiFi nunca va a ser objetivo de un atacante, debemos ser prudentes y mejorar nuestro sistema de seguridad. Que un intruso utilice nuestra WiFi puede causarnos, además de incómodos fallos de funcionamiento, importantes problemas con la justicia.
Sólo necesitamos ponernos al día y aplicar unas recomendaciones básicas:
Mejorar el cifrado de la red a WPA2.
Cambiar las claves por defecto, tanto de la red como la del acceso al panel de control, y utilizar siempre claves robustas.
Verificar periódicamente quién se conecta a nuestra red. Con la aplicación adecuada podemos comprobar que se están conectando a nuestra red sólo nuestros dispositivos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario